La
animación sociocultural no se queda fuera de la filosofía o iniciativas que
promuevan el desarrollo humano ya que está encaminada a potenciar el desarrollo
comunitario a través de sus diversas manifestaciones. Su quehacer cultural se
refiere a un desarrollo:
- Transfiere la dinámica cultural a
los colectivos desde un pensamiento global
- Alienta a la participación de las
personas, grupos e instituciones en proyecto de innovación y cambio social.
Estos
dos conceptos tratan de ofrecer al individuo la posibilidad de convertirse en
agentes activos de su proyecto de vida y un desarrollo de la sociedad en la que
forman parte. Ucar afirma que la animación sociocultural se centra en la
metodología del proceso y el desarrollo comunitario da mayor importancia a la
finalidad de dicha manifestación.
Esta
implica un replanteamiento global de las estructuras y de las instituciones, es
decir, se encarga de reflexión sobre las manifestaciones culturales actuales y
remodelarlas o cambiarlas de tal manera que favorezcan a que los individuos se
desarrollen tanto individual como colectivamente.
Para
llevar a cabo el quehacer cultural es necesario planificarlo y se deben
afrontar entre otros aspectos tener en cuenta el contexto al que va a ir
dirigido de acuerdo con las demandas de la población, optimizar los recursos
existentes, integrar el conocimiento científico.
Bibliografía
Gómez, J. A. (2005). La animación sociocultural y el
desarrollo comunitario como educación social. Revista de educación,
73-88.
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